¿Ya terminaron de ver las series que recomendé en la primera parte del post? Perfecto, porque ahora les traigo tres series más dignas de maratón y volverse loco...

Drama/Thriller, creada por Jed Mercurio

Arrancamos con una cortita de tan solo 6 episodios. Bodyguard (que no tiene nada que ver con la peli de Kevin Costner y Whitney Houston) es una miniserie inglesa que salió en la BBC One en los últimos meses de 2018.

Es un thriller y drama político que tiene como protagonista a David Budd, un Sargento y veterano del ejército que sufre de trastorno por estrés postraumático (lo que le genera un comportamiento bastante volátil) producto de sus experiencias en Afganistan y que ahora se gana la vida como especialista de protección en la policía. En un giro del destino(?), lo asignan como protector full time de Julia Montague, la Ministra de Interior, cuyas políticas son básicamente todo lo que David desprecia del sistema político de su país. Entre su trabajo defendiendo a la mujer que representa todo lo que odia y sus propios ideales (y trastornos que no puede controlar)... ¿qué va a hacer David?

Bodyguard es una gran muestra de que no hacen falta mil episodios para contar algo y nos mantiene en vilo durante los 6 episodios (cada uno de 1 hora de duración), mostrando una química impecable entre los dos protagonistas (el gran atractivo de la serie), que se verán metidos en medio de una trama de conspiraciones políticas que se vuelven cada vez más violentas, en un tira y empuje por obtener el poder de turno, culminando con un capítulo final a pura tensión.

¿La quieren ver? Netflix la subió hace un par de meses. Ideal para un finde de lluvia acompañada de buen morfi y un helado.

SCORPION

Aventura/Comedia/Acción, creada por Nick Santora

Walter O'Brien es un genio con un CI de 197 y experto en básicamente todo pero principalmente es un infla huevos que se lleva mal con todo el mundo excepto con sus tres compañeros Toby (psiquiatra, CI 170), Happy (ingeniera mecánica) y Sylvester (genio de las matemáticas con una memoria privilegiada). Ellos juntos forman el grupo Scorpion, un equipo de genios incomprendidos y antisociales que venden sus conocimientos al que sea que ponga la guita. Y en eso aparece el agente del FBI Cabe Gallo (interpretado por el genio de Robert Patrick alias T1000) que les ofrece convertirse en asesores a tiempo completo de la división y utilizar sus habilidades para resolver los graves problemas que se enfrentan en Seguridad Nacional. La cosa es que Gallo y O'Brien tienen una historia pasada de amistad que terminó en pelea y mucho no se quieren ver, pero Walter acepta a regañadientes la oferta. Luego se une al grupo Paige, que no es una super dotada en ninguna de las materias de ellos, pero sí tiene algo que ellos no tienen: sabe cómo sociabilizar y los ayuda en ese sentido.

Un episodio de Scorpion es básicamente así: están ellos cuatro en su galpón/oficina boludeando cuando de repente Cabe Gallo entra a los gritos (cumple al 100% el prototipo de "agente del FBI") diciendo que detectaron una nueva amenaza que tienen que resolver cuanto antes o se va a morir un montón de gente. Cada capítulo es una historia autoconclusiva aunque por supuesto toda la trama completa va mostrando el desarrollo de sus personalidades y como se van modificando las relaciones entre sí.

Decir que Scorpion es una serie inolvidable es un gran error porque no lo es ni por asomo, pero sí es una gran fuente de entretenimiento. Acá todo es increíblemente exagerado, siempre zafan faltando segundos para que explote todo, hay escenas de acción ridículas, gadgets inexistentes, muchos one liners de parte de Gallo pero sobre todo mucha buena onda y humor, con un grupo de 6 personajes bien hechos totalmente diferentes entre sí pero que juntos se complementan a la perfección. 

Scorpion es una serie ideal para cuando uno está al pedo y no sabe qué ver y no quiere pensar ni quemarse la cabeza... te ponés un capítulo y a pasar un rato sumamente agradable disfrutando de una buena aventura sin vueltas ni intención de cambiarle la vida a nadie. Cuando te quieras acordar, ya te viste 4 de una. Para verla no tienen que ir más lejos que Netflix donde está completa.

EL MINISTERIO DEL TIEMPO

Fantasía/Aventura, creada por Pablo y Javier Olivares.

Todo lo que sea con viajes en el tiempo me copa y mucho y esta hacía tiempo me venía apareciendo entre las sugeridas en la gran N roja, así que un día buscando qué ver le di play.

El Ministerio de Tiempo nos muestra el gran secreto que oculta el gobierno de España: debajo de un edificio abandonado se encuentra el ministerio más espectacular de todos, el Ministerio del Tiempo. En este lugar (sólo conocido por los reyes, presidentes y sus pocos empleados) se concentran las puertas del tiempo, pasajes que llevan a distintos puntos del pasado de la historia de España. Allí están las patrullas, que son los encargados de mantener la historia en su camino sin que nada ni nadie la modifique.

Estas patrullas están constituidas por personas de varios tiempos diferentes. Los protagonistas son Julian (enfermero, de 2015), Amelia (estudiante universitaria, 1882) y Alonso (soldado del ejército, 1569), que son enviados por Salvador (el subsecretario del Ministerio) a resolver un montón de quilombos a lo largo de la rica historia de España. Pero si la historia está escrita, ¿qué es lo que tienen que solucionar? Es que todas las puertas no se encuentran en el Ministerio y hay un montón dando vueltas por toda España y son usadas por los villanos de turno para ir al pasado e intentar cambiar los sucesos. Luego de la primer temporada, se les une Pacino, un policía de 1982.


Obviamente la serie cuenta muchísimo sobre la historia de España que por razones obvias la mayoría de los argentinos no conocemos, pero a fuerza de buenos guiones y una enorme producción los episodios son muy entretenidos y te enganchás enseguida. Igualmente, aparecen muchos personajes históricos que los conocemos todos, como por ej. Lope de Vega, Miguel de Cervantes, Adolf Hitler, e incluso Alfred Hitchcock y de hecho el famoso pintor Diego Vélazquez resulta ser empleado del Ministerio. Los personajes principales tienen una muy buena química entre sí y destaco también que la serie tiene un gran timing para el humor, que no es poco pero en todos los casos muy efectivo.

Como dije, la serie es super entretenida y cada episodio es un mini film ya que cuenta con una producción de escenarios y vestuarios realmente digna de destacar. En cuanto a la parte de fantasía que son los viajes en el tiempo, la serie se toma bastantes libertades (algunas un poco ridículas) en pos de formar una buena trama aunque se impuso una propia regla interesante que es que las puertas no llevan a un punto exacto fijo sino que el tiempo corre ahí también, como por ej. una puerta un día conduce al 14 de abril de 1567, pero si vas dos días después vas a llegar al 16 de abril. Esto obviamente para agregar más dramatismo a los episodios.

Al momento hay 3 temporadas y se dice que en cualquier momento confirman una 4ta. Las 3 están completas en Netflix. Lo único negativo es que son episodios un tanto largos, entre 60 y 70 minutos cada uno. Pero una vez que ves uno... querés seguir.