Estamos en diciembre, se acerca una nueva Navidad y todos estamos ansiosos por recibir nuestros regalos. Esta fiesta se viene celebrando alrededor del mundo desde hace siglos, conmemorando el nacimiento de Jesús, figura central de la religión cristiana. Para ir preparándonos en este nuevo post de Expreso a Neptuno voy a contar los comienzos de la Navidad, qué se festeja, los orígenes de las tradiciones, de dónde salió Papá Noel y al final un poco de cultura pop relacionada.

Los Tres Chiflados son una verdadera leyenda. Con un total de 190 cortos para televisión en 40 años de carrera, han dejado una huella imborrable en el mundo de la comedia y el entretenimiento, gracias a su humor desfachatado, pionero del género slapstick, y al día de hoy siguen haciendo deleitar a nuevas generaciones que descubren en ellos una forma de hacer reír única.

El viernes pasado fui a ver el show de Nightwish al Luna Park. Era mi cuarta vez viendo a esta famosa agrupación finlandesa y esto es lo curioso: la vi con tres cantantes diferentes. Esto me hizo recordar a todo el despelote que se armó cuando la cantante original Tarja Turunen se fue (o "la fueron", mejor dicho), despelote que no terminó nunca y sigue hasta el día de hoy, a pesar de que la reemplazante de Tarja fuera también echada y reemplazada. En fin, esas discusiones que están siempre y jamás van a tener un final.

Entonces, me pareció una buena idea para este nuevo post de Expreso a Neptuno, y festejando el cumpleaños del blog, recopilar algunas historias de cambios de miembros que hayan tenido un efecto rutilante en el medio musical. No me refiero a casos como que Dimmu Borgir cambió el bajista, porque ese tipo no le interesa a nadie, sino cambios que realmente significaron un antes y un después en la historia de una banda y marcaron la carrera, para bien o para mal, de los involucrados.

Yo soy una persona enamoradiza. Soy de esos que si una chica random le sonríe por que le cedió el asiento en el colectivo, ya se imagina toda una vida juntos llena de felicidad. Dirán que más que enamoradizo soy un pelotudo, pero ¿qué mejor persona que una que piensa algo así de inocente para usar junto a la tan famosa frase "mamá, papá, les presento a mi novio"? Y siendo tan fácil de sentimientos, obviamente fui víctima de un amor lejano.

En alguna oportunidad les conté que estudio química. Si bien no soy un apasionado, ni mucho menos, me parecen geniales los datos que nos aporta sobre fenómenos a los que estamos expuestos diariamente. Hace poco cursé una materia que se relaciona con el estudio de los alimentos, por lo que en esta oportunidad vengo a contarles algo a lo que nos enfrentamos muy a menudo (al menos aquellos que somos un tanto fanáticos del pan).

Volver al Futuro es un clásico absoluto del entretenimiento. Es una de esas películas (me refiero a toda la saga) que uno puede ver una y otra vez y siempre se va a divertir. A fuerza de una historia magnífica y de personajes emblemáticos (con actuaciones igual de emblemáticas) se ha ganado un lugar enorme en el corazón de una generación entera. Ahora bien, sabemos que no son perfectas y tienen sus errores, como todo film en existencia, pero los dejamos pasar porque el disfrute es tan grande que, sinceramente, no importa. Las amamos.

Y entre tanta ida y vuelta en el tiempo, han aparecido por Internet una serie de teorías que a priori suenan como humo del más espeso pero al analizarlas suenan ridículamente lógicas. Hoy en (leer con voz de locutor) este nuevo post de Expreso a Neptuno voy a compartir una que respondería a una de las preguntas que más nos hicimos los fans de esta inolvidable saga.

En esta actualidad donde lo que importa son los hits radiales de masivo consumo, somos muchos los que seguimos siendo parte de los FDD, sigla que corresponde a Fundamentalistas del Disco. Una canción puede sobresalir, pero la obra entera es la que vale. Y hoy voy a hablar de un tipo en particular de trabajo que funciona como un todo en conjunto: los discos conceptuales.

Hay dos formas de disco conceptual: la primera es aquella que sigue un arco argumental, con sus respectivos personajes y escenas, y la otra es el que sigue un concepto en particular, sin atarse a una historia determinada pero con sus canciones unidas por una idea general en común. En este post me voy a encargar del primer caso, con una lista de grandes discos con historias para leer y seguir al ritmo de la música.

Hoy en Expreso a Neptuno voy a hablar de uno de mis formatos favoritos de música: los discos en vivo. En estudio, sin presiones y con un margen de error enorme, somos todos unos cracks... pero, ¿qué pasa cuando hay que subir a las tablas y hacer eso mismo ante la multitud que pagó la entrada? Tenés que salir y darle el show que piden, tenés que estar a la altura de las circunstancias. Por eso, para mí un disco en vivo no es simplemente un medio más de vender copias, sino que es una prueba de lo que es capaz de hacer una agrupación y de demostrar como suenan en realidad. Muchas bandas aprovechan la libertad y soltura de un show para dar rienda a su talento, ya sea improvisado o no, o para darles un nuevo giro de tuerca a las canciones.

Sin duda hay cientos de distinto tipo y calidad para escuchar, y en este post voy a remarcar algunos de mis favoritos, pero no simplemente por ser en vivo, sino por haber tenido alguna particularidad o curiosidad.

Nuestro querido Maxi ya habló de covers anteriormente en este blog, pero es un tema que a mí también me interesa y quería tocar en algún momento. Los covers pueden ser vistos para algunos como una falta de originalidad, pero para mí es todo lo contrario, y de hecho algunas de mis bandas favoritas las conocí gracias a ellos. Para mí, un cover no tiene que ser una mera copia de la canción original. Un artista que quiera realizar una versión de un tema debe apropiarse del mismo y llevarlo a su propio estilo, darle su visión y su forma, así el resultado sea lo más dispar posible. Esa es la idea de versionar una canción. ¿Cuál es la gracia de hacer algo calcado? 

Por eso y en este nuevo post de Expreso a Neptuno, voy a compartir con ustedes algunos covers originales, pero con un detalle: me dedicaré exclusivamente a covers realizados por bandas metaleras, que tomaron canciones originalmente lejos de su estilo y las llevaron a terreno propio.

Conseguí una máquina del tiempo y estoy hace varios días viviendo en 2031. Está todo muy bien, bastante cambiado, hay varios países menos. No voy a contar mucho, pero por ejemplo luego de ser eliminado dos veces más por Alemania, Argentina finalmente salió campeón del mundo en 2026, derrotando a Serbia y Montenegro (se volvieron a unir en 2019). Lo importante es que un post nuestro de un jueves de Abril de 2020 causó un torbellino mundial de comentarios y llevó el blog a un estrellato de enorme medida, debido a su contenido polémico y revolucionario nunca antes visto. Tanto fue el impacto que al año siguiente Martin Scorsese dirigió una biopic contando nuestra historia con actores de renombre (a mí me interpretó James Franco). Estuvo bien, aunque muchos hechos fueron exagerados y otros inventados para darle más dramatismo cinematográfico. Por ejemplo nunca nos fuimos a pasar Semana Santa a Tailandia. Además, en 2023 Nacho ganó varios premios de ciencia por haber inventado unas plantas que se riegan así mismas usando energía solar. En fin,  como verán nos espera un futuro prometedor, lleno de fama y fortuna.

Ahora ya volví a 2015 y me toca escribir para el blog, y luego de esta experiencia no se me ocurre otra cosa más que hablar de los viajes en el tiempo, una de las más grandes fantasías de la humanidad, de como fue aplicado a lo largo de los años en distintos medios y lo que indica la ciencia al respecto.